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J. Arrieta
Martes, 27 de mayo 2025, 00:49
julio arrieta
En el mundo antiguo todos los caminos conducían a Roma y uno de ellos, la vía XXXIV o Ab Asturica Burdigalam (Astorga-Burdeos), ... conocida como Vía Aquitana en la Edad Media, pasaba por las dos Navarras, atravesaba el Pirineo y conectaba esta zona montañosa con el resto del Imperio. A lo largo de los años se han localizado varios yacimientos de época romana en diversos puntos cercanos al recorrido de esta vía, que han sido objeto de estudio para la Sociedad de Ciencias Aranzadi. Esta entidad presentó ayer un hallazgo obtenido de uno de ellos. Se trata de un anillo de oro de 2.000 años de antigüedad extraído el año pasado del sitio arqueológico de Donazaharre, el primero de su tipo encontrado en el País Vasco francés.
La particularidad de la pieza es su llamativo parecido con otro anillo de oro que fue encontrado en 2018 por especialistas de Aranzadi en las excavaciones del yacimiento de Zaldua (Auritz - Burguete, Navarra), también romano. «El anillo de Donazaharre es muy similar al de Zaldua», explicó ayer la arqueóloga Fanny Larre en la presentació de la pieza. «Los dos son de oro y tienen una piedra azul en el centro con un motivo grabado. En el caso de Zaldua el grabado es la diosa de la Fortuna, la diosa de la abundancia. El de Donazaharre, sin embargo, es el de un guerrero que se sostiene de pie y se apoya en la lanza, ladeado al estilo romano, mira a una espada que tiene en la otra mano y tiene un escudo posado en el suelo. Este motivo lo tienen también tres ejemplares de anillos en Charente-Maritime y en Borgoña».
Oihane Mendizabal, doctora en Ciencias de la Antigüedad, destacó que este tipo de anillos eran muy comunes durante el imperio romano, y se han encontrado varios por toda Europa. Este año, sin ir más lejos, fue noticia en enero el hallazgo de un ejemplar muy similar a los navarros, también de oro, en Pacé, Bretaña, en un yacimiento vinculado también a una calzada. «La presencia de estos objetos, de oro de muy buena factura, testimonian la integración de estos pueblos en el mundo romano. Estos objetos llegaban a nuestro territorio desde centros de orfebrería del Imperio. Nos muestran lo conectados que estaban con el comercio del resto del Imperio».
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