Pablo Santiago se despide del Barakaldo: «Siempre será parte de mí»

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Pablo Santiago aterrizó en Lasesarre procedente del Vitoria, filial del Eibar. En un principio, tuvo un papel más residual. Sin embargo, tiró abajo la puerta de la titularidad a base de goles. De hecho, terminó siendo el máximo goleador del equipo en la campaña en la que los fabriles ascendieron a Primera Federación, con nueve dianas. Este último curso, lejos de acusar el salto de categoría, se ha consagrado como uno de los mejores futbolistas de este tercer peldaño nacional. Los datos hablan por sí solos. Once tantos -dos más en Copa del Rey- y siete asistencias le convierten en el segundo jugador del grupo con más participaciones de gol.

El eibarrés de 24 años ha disputado un total de 70 choques con la elástica gualdinegra, anotando 22 goles. Su verticalidad, compromiso sin balón y, sobre todo, el guante que tiene en su pierna derecha deja un recuerdo imborrable en el club, al que le dedicó unas palabras en su despedida. «Tras dos años increíbles, toca despedirse. Ha llegado el momento de cerrar una etapa muy especial para mí, etapa de mucho aprendizaje de la que me llevo recuerdos imborrables», apuntó. Tras agradecimientos a los compañeros, cuerpo técnico, trabajadores del club y afición, concluyó diciendo que «comienza una nueva etapa, pero el Barakaldo siempre será parte de mí».